18 enero 2005

TOMA VI

No esta de más volver a repetirlo: Todo hombre tiene su precio.
Tampoco está de mas repetir que DAM era de esas personas que jamas se pregunto cuál seria el suyo.
Y por ultimo, aclaración: no importa cual era el precio de DAM esa mañana. Ni ninguna otra (mañana). DAM esta muerto ahora. Por lo que parece, no fue culpa de nadie. O dicho de otra manera, si hubo algún culpable, tenia toda la razón del mundo. Entonces: inocente.
Si DAM pudiera haberlo pensado dos veces lo volvería a hacer. En casi ningún momento de su vida estuvo tan seguro de lo que tenia que hacer como esa mañana de febrero.
Esa mañana, a no ser por el incidente, no se diferenciaría de ninguna de las otras mañanas de ese febrero pegajoso y tropical. A la tarde, temprano, llovió un poco, pero enseguida volvió a salir el sol, volviendo el calor húmedo. DAM no dormía siesta. Y menos esa tarde: estaba muerto hacia varias horas. Y encima con el calor, las moscas. Un asco.
Momentos antes de su muerte, segundos, se sintió como uno de esos personajes de Quiroga.Había leído bastante DAM. Mas que nada autores argentinos que hacia rato que no estaban vivos. A lo mejor de tanto leer era que se le habían metido esas ideas raras en la cabeza, dijo alguien. Y, según parece, es un razonamiento sensato.